HOMBRES Y MUJERES DIFERENTES CONVERSACIONES

Por que es tan dificil la comunicación entre hombres y mujeres ?

Los hombres y las mujeres se comunican desde diferentes visiones del mundo.

Los hombres ven el mundo como un orden social jerárquico, se está arriba o se está abajo.

Los hombres se comunican invocando el estatus que la cultura le ha otorgado. "Yo estoy arriba y puedo ver lo que te pasa y te aconsejo".

 Las mujeres  en cambio vemos el individuo en una red de relaciones. En este mundo las conversaciones son NEGOCIACIONES para estrechar vínculos. La vida es una comunidad, un esfuerzo por conservar la intimidad y evitar el aislamiento. Aunque existen las jerarquías son más de amistad que de poder.

La comunicación es un acto que va contrapesando continuamente intimidad e independencia.

Los hombres privilegian el estatus, la independencia, la asimetría y la competencia.

El mundo de las mujeres privilegia los vínculos, la simetría y las relaciones de pares.

Todas estas diferencias comienzan en la infancia en la casa, el barrio o la calle, niñas  y niños crecen en distinto mundos de palabras. Las personas les hablan de modo diferente y esperan de ellos o ellas respuestas diferentes.

Hombres y Mujeres somos educados como si fuese en diferentes culturas, siendo la comunicación entre hombres y mujeres un asunto transcultural.

Todos queremos ser comprendidos, deseamos que se escuche lo que creemos que decimos, lo que queremos significar.

Alice Walker explicaba que en su novela una mujer se enamora de un hombre porque ve en él a “una oreja gigante” y  que muchas personas creen que  se enamoran por atracción sexual o por alguna extraña fuerza, cuando en realidad “estamos buscando a  alguien que sea capaz de escucharnos”.

Especialmente las mujeres desean ser comprendidas mas no aconsejadas por sus parejas, como es usual que los hombres  lo hagan ante un problema expuesto por su mujer tomando el rol de solucionador de problemas que sugiere  rol superior  y de  estatus.

Los hombres no se identifican a menudo con los problemas de las mujeres y estas se frustran ante tal proceder, en cambio  los hombres se sienten ofendidos  por que las mujeres se identifican con sus problemas  y así les resta importancia a su experiencia.

Ante los problemas las mujeres no toleran la tendencia de los hombres a solucionar TODOS los problemas, y los hombres se sienten mal porque las mujeres no solucionan los problemas de los que se quejan.